Aunque todo el mundo sabe que la industria de la animación ha crecido exponencialmente en la última década, nos encontramos con que Amazon no intenta quedarse atrás apostando por las series animadas, pues es un área muy delicada porque es un equilibrio de un formato completamente diferente, la dificultad de encontrar el punto exacto de fidelidad a la fuente original para que el producto final no esté influenciado por el Fandom, que en este caso es fiel a la calidad del manga o cómic.
El término adaptar no es en absoluto sinónimo de observar tramas, diálogos, escenas y giros dramáticos; y cuando se trata de traducir viñetas en imágenes en movimiento, las diferencias entre los dos medios exacerban este desafío; aunque la cadencia y el proceso narrativo, la cinética y el estilo plástico del dibujo bidimensional y el personaje episódico dividido en números cortos propio del noveno arte hacen que todas las posibilidades de la serie de animación sean perfectas para intentar jugar a un milagro.
‘Invencible’ es una de las mejores animaciones que nos ha dado el reciente panorama audiovisual de superhéroes; una reinterpretación del universo de una obra ya excepcional sobre los papeles de Robert Kirkman, Cory Walker y Ryan Ottley en un espectáculo hilarante y salvaje, del que se respira cómic en cada película.
Una adaptación para enmarcar
En cierta medida, no es de extrañar que la versión catódica de ‘Invincible’ acabara convirtiéndose en una pequeña joya que nos preocupa; y eso se debe a que Kirkman, Walker y Oatley, que actúan como showrunners adaptables, están lo suficientemente retorcidos como para encontrar un equilibrio casi perfecto.
En el primer capítulo de la serie, la intención del trío de co-creadores que decidió pisar el acelerador es muy clara y los primeros 45 minutos terminarán con un giro en medio del arco llamado «Con ocho es suficiente». De esta forma, deja fuera de la ecuación al Teen Team y juega con las subtramas originales -relevándolas u omitiéndolas- para prolongar el conflicto principal y aumentar la dosis de tensión.
A pesar de estos cambios significativos, no cabe duda de que «Invencible» es sumamente fiel a la obra impresa y se distancia de ella solo para optimizar su narración y darle al conjunto un ritmo especial que invita a devorar episodio tras episodio prácticamente sin parpadeo. .
Esta capacidad de atrapar se ve muy potenciada por el tono heredado de la viñeta, que hace gala de un envidiable sentido del humor y bebe del trópico del subgénero a la sátira con gran inteligencia y una inmensa soltura, presente también en sus acertados diálogos.
En el mismo plano, muestra una animación respetuosa con el trabajo de Cory Walker y Ryan Ottley -aunque con algunas variaciones en el diseño de rostros-; espectaculares en sus animadas escenas y no escatiman a la hora de ser los más violentos y destacados cuando la situación lo requiere.
Para colmo, con la notable banda sonora de John Paesan y una colección de voces de clase mundial, incluidos los nombres de personajes como JK Simmons, Steven Yeun, Sandra Oh o Walton Goggins, el resultado es una adaptación ejemplar en varios aspectos que cumple dos objetivos principales: satisfacer a los que conocen las aventuras de Mark, Eva y spol. basados en la lealtad y el cambio suficiente para mantener su atención y atraer a un público en ciernes que seguro disfrutará tanto como ellos. -Epopeya de superhéroes en su género.